El buque oceánico 'Río Segura' de la Guardia Civil patrullará la costa guipuzcoana durante la primera semana de septiembre

02/09/2022

  •    El buque establecerá su base logística en el Puerto de Pasajes desde donde recorrerá la costa vasca para reforzar la vigilancia del entorno marítimo en el marco de la campaña de pesca.

El buque oceánico Río Segura, perteneciente al Grupo Marítimo de Canarias, del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, atracó el pasado jueves, día 1 de septiembre, en el Puerto de Pasajes, donde ha establecido su base logística durante sus patrullajes en aguas de la comunidad autónoma hasta el día 7 de septiembre, siendo la primera vez que efectúa el atraque en un puerto de la comunidad autónoma y realiza cometidos en estas aguas.

Centrará sus cometidos en el control y apoyo a la flota pesquera profesional y embarcaciones de recreo durante la costera de bonito, en el marco de la campaña de vigilancia de pesca en Guipúzcoa, y resto del entorno del litoral cantábrico, contando ocasionalmente para estos cometidos, con la participación de varios inspectores del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación embarcados en el propio buque.

También supondrá un gran refuerzo a la seguridad marítima en la costa guipuzcoana, y vasca en general, dado que con frecuencia efectúa numerosos auxilios a la flota pesquera profesional, siendo el buque de mayor tamaño y más moderno de la flota de la Guardia Civil.

El viernes día 2 de septiembre, realizó visita al buque el Subdelegado del Gobierno en Guipúzcoa, acompañado por otras autoridades, participando también en la jornada de puertas abiertas más de 50 organismos oficiales, entidades privadas, clubs deportivos, asociaciones y otros colectivos vinculados al mar.

Buque Río Segura

El buque “Río Segura”, con base en Las Palmas de Gran Canaria, es uno de los tres buques oceánicos que pertenecen a los Grupos Marítimos del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, cuenta con apoyo puntual de personal civil y con capacidad para una tripulación de 39 efectivos policiales formados en el nuevo Centro de Enseñanza y Perfeccionamiento del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, y tiene como misión principal, el control de la frontera de Europa en mar abierto, la lucha contra la inmigración irregular, el narcotráfico, el contrabando, los delitos contra el medio ambiente, control de pesca, y la búsqueda y rescates.

Construido en Asturias, es el primer patrullero oceánico diseñado específicamente para las funciones de la Guardia Civil. Tiene 73 metros de eslora y 12 de manga, pudiendo permanecer durante periodos prolongados de hasta 60 días en el mar.

Está equipado con diferentes medios tecnológicos para desarrollar las operaciones y misiones que se le encomienden, tanto a nivel europeo con la Agencia Europea de Fronteras FRONTEX, como en el ámbito internacional, coordinado con autoridades de Mauritania y Senegal, entre otros países africanos, en misiones de vigilancia de fronteras exteriores de la Unión Europea.

Asimismo, dispone de dos embarcaciones auxiliares de intervención rápida y salvamento, un helipuerto y una enfermería con sistema de telemedicina, que conecta directamente con médicos de guardia del Hospital Central de la Defensa “Gómez Ulla” en Madrid, entre otras capacidades.

Una de sus actuaciones más destacadas fue su participación en el año 2.016, en la operación “Tritón”, de la Agencia de Fronteras Exteriores (FRONTEX), en la costa sur de Italia, para el auxilio y rescate de migrantes en el mar Mediterráneo, dónde los guardias civiles del Río Segura, rescataron a más de 2.300 personas, y prácticamente, la mitad de ellas fueron atendidas medicamente en el propio buque.

La Guardia Civil opera además con otros dos buques oceánicos: el Río Miño y el Río Tajo, embarcaciones readaptadas para las tareas de vigilancia marítima. El Río Miño, es un antiguo pesquero japonés habilitado para la función policial y el Río Tajo fue en su origen un barco de salvamento alemán que se transformó para llevar a cabo misiones encomendadas a la Guardia Civil.